Objetivo:
Ayudar al Jóven a ejercitar nuestra fe fortaleciendo nuestra perspectiva
correcta.
Versículo a Memorizar:
“No mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se
ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son
eternas”. 2 Corintios 4:18
Introducción:
Pablo tuvo un ministerio de mucha tribulación, con
azotes, hambres, carceles y frios entre otras cosas, pero al final de sus días
escribió en 2 Timoteo 4:7 He peleado
la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. Y aprendimos en 2 Corintios 4:1-12 que para
conseguir no desmayar y terminar la carrera, Pablo se había sostenido en 7
certezas para llevar a cabo su ministerio:
1)
La certeza del Nuevo
Pacto
2)
La certeza de su
misericordia
3)
La certeza de un
corazón limpio
4)
La certeza de la Palabra
no adulterada
5)
La certeza de la
soberanía de Dios
6)
La certeza de nuestra
insignificancia
7)
La certeza del
sufrimiento
Ahora nos dirá en forma práctica como debemos
vivir para ir tomándonos de esas certezas al igual que nos lo dijo es escritor
de Hebreos en Hebreos 12:2a puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la
fe.
Desarrollo:
13 Pero
teniendo el mismo espíritu de fe, conforme a lo que está escrito: Creí, por lo
cual hablé, nosotros también creemos, por lo cual también hablamos,
Pablo hace referencia a Salmos 116:10, donde
se puede leer que el salmista estaba en medio de gran aflicción por causa del
testimonio, sin embargo, por causa de la revelación del Espíritu de fe, había
creído y por eso, a pesar de la aflicción hablaba con certeza, confianza y
denuedo. Por lo tanto, gracias a que Pablo compartía el mismo Espíritu de fe y
la misma esperanza con todos los santos, incluido aquel que había escrito el Salmo
116, se atrevía a hablar a pesar de todas las aflicciones descritas a partir
del versículo 7, las cuales padecía por causa del testimonio de Cristo.
14 sabiendo
que el que resucitó al Señor Jesús, a nosotros también nos resucitará con
Jesús, y nos presentará juntamente con vosotros.
Pablo estaba seguro de que en el dia de la
resurección, Dios le resucitaría juntamente con lo Corintios ya que el poder
para vencer a la muerte ya había sido mostrado en Jesucristo cuando Dios le
resucitó. Recordemos que la resurección de Jesucristo entre los muertos es la
base de nuestra fe, ya que solo Jesús ha podido vencer a la muerte mostrando
con eso que El es Dios, y que la muerte no podía retener al dador de vida.
15 Porque
todas estas cosas padecemos por amor a vosotros, para que abundando la gracia
por medio de muchos, la acción de gracias sobreabunde para gloria de Dios.
Algunas veces vamos a pasar momentos
difíciles. Pablo paso por mucho sufrimiento, pero el hablaba del evangelio y no
se fijaba en eso, ya que cuando la gente conocía de Jesús producían acciones de
gracias para la Gloria de Dios, no solo decían “gracias” sino que comenzaban a
vivir una vide de agradecimiento a Dios y le servían y le honraban consus
vienes y con su tiempo.
16 Por
tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va
desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día.
Apacere por segunda vez la frase “no desmayamos” (vs
1,16) que significa que Pablo no se desanimaba, el sabía en quien había creido.
No había desánimo aún sabiendo que nuestro cuerpos, aunque los cuidemos mucho,
se van a ir desgastando y nos vamos ir haciendo viejitos, pero cuando tenemos
comunión diaria con Jesucristo y Su palabra, nuestro ser interior se renueva
cada dia y nos permite amar más a Jesús, anhelar servirle más y obedecerle más.
Aquí observamos el contraste entre el Hombre Exterior que se envejece y el
Hombre Interior que se rejuvenece si es que el Espíritu de Dios mora en él.
17 Porque
esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente
y eterno peso de gloria;
Las difcultades que pasaba Pablo aunque eran muchas y muy severas, para el eran leves y momentaneas comparadas con la gloria de Dios que se manifestaba en su vida. Aqui el contraste esta entre la leve tribulación momentanea y el eterno peso de gloria.
18 no
mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas
que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.
Es necesario poner los ojos en Jesús y no enfocarnos
en las cosas materiales que se ven, ya que solo son temporales, pero cuando nos
enfocamos en Cristo, en Su Palabra y en Su Espíritu estarémos poniendo nuestra
vista en las cosas que son eternas. ¿A dónde o a quién estás mirando?, ¿Cuál es
la razón por la que estas estudiando una carrera? ¿Es una razón temporal o
eterna?
Aplicación
Práctica: Bajo cualquier
circustancia y mucho mas durante las tribulaciones, voltear nuestra mirada a
Jesús para que la persfectiva de lo que estamos pasando se ajuste y veamos que
lo que realmente importa es lo espiritual y eterno ya que lo material siempre
será temporal.