Objetivo: Ayudar al jóven a reconocer la supremacía del
evangelio, sobre cualquier derecho, en quienes han sido llamados para vivirlo y
compartirlo.
Versículo a memorizar: “Si anuncio el evangelio, no tengo por qué gloriarme; porque me es
impuesta necesidad”. 1 Corintios 9:16
Desarrollo:
1 Corintios 9:2-3 2Si para otros no soy apóstol,
para vosotros ciertamente lo soy; porque el sello de mi apostolado sois
vosotros en el Señor. 3Contra
los que me acusan, esta es mi defensa:
Pablo pasaba un problema muy
frecuentemente en los lugares que visitaba y compartía del evangelio de
Jesucristo y era que como no estuvo con los 12 discípulos de Jesús, varias
personas no lo consideraban como ápostol; y eso estaba sucediendo en Corintio
también, además de no considerarlo ápostol; tampoco le sostenían financieramente
la obra Dios que el hacía, por eso Pablo con los Corintios defiende su
apostolado recordándoles que fue él mismo el mensajero que Dios mandó para
predicarles de Jesucristo y que al haber creido ellos mismos certificaban que
si era un ápostol; es decir; un enviado de Dios con el mensaje de salvación.
1 Corintios 9:7 ¿Quién fue jamás soldado a sus propias
expensas? ¿Quién planta viña y no come de su fruto? ¿O quién apacienta el
rebaño y no toma de la leche del rebaño?
Para mostrarles lo ilógico que
era que la iglesia en Corinto que había sido establecida por Pablo no le
ayudara con su sustento, les muestra tres ejempos cotidianos que muestran lo
normal que es tener recursos financieros en base a lo que cada uno se dedica,
pone el ejemplo de los soldados que no van a la guerra pagando sus propios
gastos, sino que el país que los envía, les sustenta con comida, ropa, techo e
incluso con un salario; también les pone el ejemplo de un agricultor que a la
hora de cosechar el fruto de lo sembrado, siempre toma de ese fruto para el y
eso es normal; por último nos da el ejemplo de un pastor de un rebaño que cuida
a sus animales y que es de lo mas normal que al cuidarlo tome de su leche mostrándoles
lo normal que debía de ser que Pablo recibiera recursos financieros de los
Corintios ya que el se dedicaba a predicar el evangelio y podía tomar de ellos
lo material.
1 Corintios 9:8-10 8¿Digo esto sólo como
hombre? ¿No dice esto también la ley? 9 Porque en la ley de
Moisés está escrito: No pondrás bozal al buey que trilla. ¿Tiene Dios cuidado
de los bueyes,10 o lo dice enteramente por nosotros? Pues por
nosotros se escribió; porque con esperanza debe arar el que ara, y el que
trilla, con esperanza de recibir del fruto.
Dios mismo había dejado ese
principio de que el que trabaja pueda comer de lo que trabaja y aún lo
establecio en los animales que trillaban el grano, cuanto mas aplica a los
hombre que Dios usa para predicar su hermoso evangelio.
1 Corintios 9:14 Así también ordenó el Señor a
los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio.
Les recordó que Jesús mismo lo
dejó establecido cuando mencionó en Mateo 10:10b el obrero es digno de su
alimento
1 Corintios 9:18 ¿Cuál, pues, es mi galardón? Que predicando
el evangelio, presente gratuitamente el evangelio de Cristo, para no abusar de
mi derecho en el evangelio.
Si Pablo teniendo derecho de
recibir ayuda financiera de los Corintios había decidido no usar ese derecho
para poder predicar el evangelio gratuitamente y son libertad y ese era su
galardón, es decir; la recompensa que el buscaba, no el dinero sino el
participar con Cristo en la extensión de Su reino.
1 Corintios 9:24 ¿No sabéis que los que
corren en el estadio, todos a la verdad corren, pero uno solo se lleva el
premio? Corred de tal manera que lo obtengáis.
Ahora el Espíritu Santo por
medio de Pablo nos ilustra que una vez que Dios nos ha salvado, que nos ha
pasado de muerte a vida, de las tinieblas a la luz, ahora estamos en una
carrera, no para salvación sino para vivir el evangelio y recibir recompensas
espirituales para llevarle al Señor cuando lo tengamos frente a nosotros y nos
suguiere que estamos en una carrera pero debemos correrla con la intención de
ganarla.
1 Corintios 9:25 Todo aquel que lucha, de
todo se abstiene; ellos, a la verdad, para recibir una corona corruptible, pero
nosotros, una incorruptible.
Si los atletas se abstienen de
cierto tipo de comida, se levantan muy temprano para entrenar y cuando salen
competir se tienen que separar de sus familias, etc y todo eso lo hace por una
pequeña medalla de oro o plata que no tiene tanto valor, cuanto mas deberíamos
nosotros abtenernos de lo que nos impida vivir y compartir el evangelio
sabiendo que nuestra medalla no será temporal sino eterna y no esta en la
tierra sino en el cielo.
1 Corintios 9:26 Así que, yo de esta manera
corro, no como a la ventura; de esta manera peleo, no como quien golpea el
aire,
La carrera del evangelio no se
corre como pensando que a la mitad de la carrera me salgo o a ver a donde me
lleva esta carrera, sino pensando en terminarla; así tampoco como tirando
golpes al aire como el boxeo de sombra que se usa en los entrenamientos de los
boxeadores, sino dando golpes certeros porque no estamos en entrenamiento ya
estamos en la pelea.
1 Corintios 9:27 sino que golpeo mi cuerpo,
y lo pongo en servidumbre, no sea que habiendo sido heraldo para otros, yo
mismo venga a ser eliminado.
Pablo quería correr la carrera del evangelip ara ganarla y renunciaba a
muchos de sus derechos con tal de no ser eliminado; entiendáse ser
descalificado como en una carrera, y no habla de perder la salvación sino de
perder el privilegio de compartir el evangelio a otras personas y ganarlas para
Cristo.
Aplicación Práctica: Aprender que debemos sostener
a nuestros pastores, y que debemos estar dispuestos a renunciar a algunos de
nuestros derechos para no poner obstáculo a la predicación del evangelio.
Además saber que estamos en una
carrera que debemos correr como para ganarla, ser obedientes a lo que Dios te
va indicando y compartir el evangelio con otros con libertad.
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