Sunday, December 23, 2018

Éxodo 25:1-9 La Ofrenda Voluntaria


Objetivo: Ayudar al jóven a aprender a honrar correctamente con nuestros bienes, a nuestro Señor y Padre.

Versículo a Enfatizar: “Di a los hijos de Israel que tomen para mí ofrenda; de todo varón que la diere de su voluntad, de corazón, tomaréis mi ofrenda” Éxodo 25:2

Introducción:
Después del pacto de sangre entre Dios y el pueblo de Israel, y la visita al monte de Moisés, Aarón, sus dos hijos y 70 de los ancianos de Israel donde coieron y bebieron en la presencia del Señor, Dios le hizo otro llamado a Moisés para que subiera al monte Sinaí por las tablas de la Ley y esperara allí, Moisés tuvo que esperar 6 días allí hasta que Dios le hablo para darle las instrucciones detalladas para la construcción del templo.

Desarrollo:
Vs. 1-2.
1 Jehová habló a Moisés, diciendo:

2 Di a los hijos de Israel que tomen para mí ofrenda; de todo varón que la diere de su voluntad, de corazón, tomaréis mi ofrenda.
Dios pudiendo hacer descender desde el mismo cielo un tabernáculo o pudiendo crearlo de la nada, le da la oportunidad a Su pueblo de participar en la construcción del Tabernáculo, que es una tienda de campaña movible, donde Dios mismo habitaría con ellos, esta ofrenda que les pide tiene las siguientes características:

1)    Esta dirigida exclusivamente a los hijos de Dios (y no a ningun otro pueblo)
2)    Es para el Señor, no es para Moisés, no es para el pueblo, era para Dios mismo
3)    Debía darse voluntariamente, no era obligatorio ni había una cantidad por persona
4)    Los varones como líderes de sus casas eran responsables de entregar la esa ofrenda
5)    Esa ofrende la tomarían de lo que Dios ya les había dado por medio de los egipcios cuando salieron de allá y les dieron muchas cosas de las cuales tomaran para la ofrenda

En la Escritura vemos cual debe de ser nuestra actitud a la hora de ofrendar, y como debe estar nuestro corazón con el cual Dios se agrada:
1)    Un corazón entendido como vemos en Génesis 4:3-5 3Y aconteció andando el tiempo, que Caín trajo del fruto de la tierra una ofrenda a Jehová. 4Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de lo más gordo de ellas. Y miró Jehová con agrado a Abel y a su ofrenda; 5pero no miró con agrado a Caín y a la ofrenda suya. Y se ensañó Caín en gran manera, y decayó su semblante.

2)    Un corazón agradecido como dice Genesis 8:20-22 20Y edificó Noé un altar a Jehová, y tomó de todo animal limpio y de toda ave limpia, y ofreció holocausto en el altar. 21Y percibió Jehová olor grato; y dijo Jehová en su corazón: No volveré más a maldecir la tierra por causa del hombre; porque el intento del corazón del hombre es malo desde su juventud; ni volveré más a destruir todo ser viviente, como he hecho.22Mientras la tierra permanezca, no cesarán la sementera y la siega, el frío y el calor, el verano y el invierno, y el día y la noche.
3)    Un corazón bendecido como indica Genesis 14:18-20 18Entonces Melquisedec, rey de Salem y sacerdote del Dios Altísimo, sacó pan y vino; 19y le bendijo, diciendo: Bendito sea Abram del Dios Altísimo, creador de los cielos y de la tierra; 20y bendito sea el Dios Altísimo, que entregó tus enemigos en tu mano. Y le dio Abram los diezmos de todo.

4)    Un corazón comprometido como se lee en Genesis 28:20-22 20E hizo Jacob voto, diciendo: Si fuere Dios conmigo, y me guardare en este viaje en que voy, y me diere pan para comer y vestido para vestir, 21y si volviere en paz a casa de mi padre, Jehová será mi Dios.22Y esta piedra que he puesto por señal, será casa de Dios; y de todo lo que me dieres, el diezmo apartaré para ti.

5)    Un corazón alegre como escribió Pablo en 2 Corintios 9:7 Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre.


Vs. 3-7.
3 Esta es la ofrenda que tomaréis de ellos: oro, plata, cobre,
4 azul, púrpura, carmesí, lino fino, pelo de cabras,
5 pieles de carneros teñidas de rojo, pieles de tejones, madera de acacia,
6 aceite para el alumbrado, especias para el aceite de la unción y para el incienso aromático,
7 piedras de ónice, y piedras de engaste para el efod y para el pectoral.

Todos estos materiales que Dios les pide se pueden agrupar en 6 grandes grupos y todos ellos se usarán en el tabernáculo, y en las vestirduas de los sacerdotes como sigue:
1.- Metales
·      Oro (para el Arca de la alianza, para la mesa de los panes de la propocisión, para el candelabro, para el altar de incienso, para la corona del sumo sacerdote)
·      Plata (para la barda exterior del Tabernáculo)
·      Cobre (para la barda exterior del Tabernáculo, para el altar de bronce, para el lavacro)
2.- Telas
·      Azul, púrpura, carmesí (rojo escarlata), lino fino (para los velos del tabernáculo y para las vestiduras de los sacerdortes)
3.- Pieles.
·      De cabras, carneros y tejones (para el techo del tabernáculo)
4.- Madera.
·      De Acacia (para el arca del pacto, para la mesa de los panes de la propocisión, para el altar de bronce)
5.- Aceites.
·      Aceites y Especias (para el aceite de las lamparas del candelabro de oro)

6.- Piedras.
·      Ónice y Engaste (para la vetimenta del sumo sacerdote)


Vs. 8-9.
8 Y harán un santuario para mí, y habitaré en medio de ellos.
La palabra santuario viene de latin sanctus (santo), más el sufijo -ario (lugar), es decir; un lugar santo, y esto muestra primero el anhelo de Dios de habitar con su pueblo, pero siendo un Dios santo, no puede mezclarse con un pueblo lleno de pecado, por lo que este lugar lo mantendría con ellos pero al mismo tiempo separado de ellos.

9 Conforme a todo lo que yo te muestre, el diseño del tabernáculo, y el diseño de todos sus utensilios, así lo haréis.

Dios no solo le dio las instrucciones sobre la construcción de este santuario (tabernáculo) sino que se lo mostró también en ese mismo monte como dice  Hebreos 8:5 los cuales sirven a lo que es figura y sombra de las cosas celestiales, como se le advirtió a Moisés cuando iba a erigir (levantar) el tabernáculo, diciéndole: Mira, haz todas las cosas conforme al modelo que se te ha mostrado en el monte.
Aplicación Práctica:

- Aprender que ofrendar a Dios, es un privilegio que tenemos Sus hijos, y que debemos hacerlo con un corazón entendido, agradecido, bendecido, comprometido y alegre.

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