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Versículo a memorizar: “Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos.” Judas 1:3
Información General:
Autor: Judas, quien era medio hermano de Jesús y hermano de Santiago.
Fecha: Alrededor del año 70d.C.
Destinatario: No tiene destinatario especifico, por lo que forma parte de lo que se conoce como cartas universales, que se copiaban y se leían en todas las Iglesias.
Propósito de la carta: La carta hace énfasis y exhorta a que los que viven la vida cristiana contiendan eficazmente por la fe y advierte cómo se puede identificar a quienes adulteran la fe.
Introducción:
Judas después de presentarse como siervo de Jesucristo, le escribe a la iglesia mencionándola con las siguientes características, que somos llamados, santificados en Dios y guardados en Cristo y entra directo a alertar sobre los falsos maestros y las falsas doctrinas que habían entrado encubiertamente a la iglesia, dándonos la instrucción clara de que debemos contender ardientemente por la fe, esos hombres impíos convierten en libertinaje la gracia de Dios y niegan a Dios como soberano y al Señor Jesucristo.
Antes de proseguir con la descripción de los falsos maestros y su mensaje, Judas recurre a la historia bíblica y da tres ejemplos del juicio de Dios que vino sobre la desobediencia y la rebelión contra Dios, mismo juicio que les espera a estos hombres perversos.
Desarrollo:
5 Mas quiero recordaros, ya que una vez lo habéis sabido, que el Señor, habiendo salvado (liberado) al pueblo sacándolo de Egipto, después destruyó a los que no creyeron.
Israelitas incrédulos. La historia bíblica nos relata que Dios saco a Su pueblo de Egipto y anduvieron un tiempo por el desierto, los israelitas mandaron 12 espías a ver la tierra que Dios les había prometido, cuando regresaron dijeron que habían visto Gigantes, solo 2 de ellos dijeron que aún así; Dios les daría la victoria, pero los otros 10 dijeron que no, y alteraron al pueblo para no creer, este relato lo encontramos en Números capítulo 14, debido a eso, Dios determino que ninguno de los que salieron de Egipto que fuera mayor de 20 años entraría en la tierra prometida, y fueron muriendo en el desierto durante esos 40 años. Según números 1:45-46 la suma de esos varones era 603,550 sin contar mujeres.
6 Y a los ángeles que no guardaron (conservaron) su dignidad, sino que abandonaron su propia morada (hogar), los ha guardado (atados) bajo oscuridad, en prisiones eternas, para el juicio del gran día;
Ángeles caídos. Dios no perdonó a aquellas poderosas criaturas celestiales creadas por Él y a las que les había dado posiciones de poder y autoridades. No obstante, cuando estos ángeles se rebelaron contra él, Dios los castigó con prisión. Probablemente se refiera a los ángeles que se negaron a obedecer a Dios porque deseaban ser como Él y se revelaron o quizá a los ángeles que dejaron su posición de autoridad y fueron a la tierra a buscar mujeres para “tomarlas como esposas”, que se relata en Génesis 6:2. Es decir, que cuando los ángeles (“los hijos de Dios”) se unieron a “las hijas de los hombres”, generaron gigantes y corrompieron la tierra (Gn. 6:4), probablemente Judas tomó esta ilustración del libro no canónico de Enoc que se menciona mas adelante.
7 como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas (Adma, Zeboin y Zoar), las cuales de la misma manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza (todo tipo de relaciones sexuales prohibidas), fueron puestas por ejemplo (advertencia), sufriendo el castigo del fuego eterno.
Ciudadanos de Sodoma y Gomorra. Ciudades conocidas como símbolos de la inmoralidad y rebeldía contra Dios, que fueron destruidas por fuego y azufre según se nos relata en Génesis capítulo 19
Fueron puestas por ejemplo. El término “ejemplo” no significa algo que debemos seguir o copiar sino algo que debemos evitar, vienen a ser como un ejemplo de advertencia de no hacer.
Sufriendo el castigo del fuego eterno. Castigo que le espera a los que se niegan a obedecer a Dios y eligen desobedecerle, en este caso no solo a Sodoma y Gomorra, sino a los falsos maestros que se metieron a la Iglesia.
8 No obstante (a pesar de ello), de la misma manera también estos soñadores mancillan (contaminan) la carne (el cuerpo), rechazan (desprecian) la autoridad y blasfeman (insultan) de las potestades superiores.
De la misma manera también. Judas compara a los falsos maestros con los israelitas incrédulos, los ángeles rebeldes y los sodomitas pervertidos.
Soñadores. Puede significar sean místicos y que pretendían tener acceso a revelaciones sobrenaturales mediante sueños.
Mancillan la carne. Contaminan el cuerpo, practicando depravaciones sexuales como los sodomitas.
Rechazan la autoridad. Estos hombres rechazan la autoridad de Dios y por consiguiente muestran un desprecio por Cristo y por Su Palabra, se rebelan a Dios como lo hicieron los ángeles caídos.
Blasfeman de las potestades superiores. Insultan a los seres superiores, la palabra original es la palabra en griego <Doxa> que significa gloria, por lo que se puede deducir que habla de ángeles de Dios.
9 Pero (ni siquiera) cuando el arcángel (jefe de los ángeles) Miguel contendía con el diablo, disputando (peleando) con él por el cuerpo de Moisés, no se atrevió a proferir (pronunciar) juicio de maldición (insultos) contra él, sino que dijo: El Señor te reprenda.
Judas manifiesta que ni aun Miguel se atrevió a presentar una acusación injuriosa contra Satanás, y estos falsos maestros no dudan en insultar a los ángeles.
Esta historia no es parte del relato bíblico del antiguo testamento, Judas toma el relato quizá de un libro no canónico que los judíos utilizaban llamado “Testamento de Moisés” o de la tradición para; de la época para ilustrar su enseñanza de que ni un poderoso arcángel se atrevió a reprender al diablo.
10 Pero (sin embargo) éstos blasfeman (hablan mal) de cuantas cosas no conocen; y en las que por naturaleza (instinto) conocen, se corrompen (destruyen) como animales irracionales (sin entendimiento).
Estos “soñadores” carecen de discernimiento espiritual, pero usan un lenguaje de insulto sobre lo que ni siquiera conocen y sobre lo que si conocen, no se comporta como hombres con entendimiento, sino que se comportan como animales, solo se dejan llevar por su instinto, como lo hacen los animales.
11 !!Ay de ellos! (pobre gente) porque han seguido el camino (ejemplo) de Caín, y se lanzaron por lucro (por ganar dinero) en el error de Balaam, y perecieron (murieron) en la contradicción (rebeldía) de Coré.
!!Ay de ellos!. Es una frase típica que usaban los profetas del Antiguo Testamento para condenar a personas o naciones.
Han seguido el camino de Caín. Génesis capítulo 4 nos relata la historia de Caín, que rechazó a Dios, endureció su incredulidad y terminó matando a su hermano Abel, convirtiéndose en el primer homicida de la historia humana.
Se lanzaron por lucro en el error de Balaam. Desde Números capítulo 22 hasta el 31, se nos cuenta la historia del profeta Balaam, donde observamos que o amaba a Dios ni a su pueblo, sino al dinero, y por su amor al dinero vendió a Israel al rey de Moab (Balac) mostrándole como corromper a los israelitas tentándolos con la inmoralidad sexual con y la adoración a los ídolos.
Perecieron en la contradicción de Coré. Este relato lo encontramos en Números 16:1–35. Donde no solo Coré, sino Datán y Abiram se negaron a aceptar el liderazgo de Moisés y Aarón por lo que fueron tragados por la tierra junto con sus familias; además de que 250 líderes fueron consumidos por el fuego, como castigo de Dios.
Judas usa estos tres ejemplos bíblicos históricos, para mostrar que en todos los tiempos, los impíos buscan destruir al pueblo de Dios.
12 Estos son manchas (vergüenza) en vuestros ágapes (reuniones de amor), que comiendo impúdicamente (sin respeto) con vosotros se apacientan a sí mismos; nubes sin agua, llevadas de acá para allá por los vientos; árboles otoñales, sin fruto, dos veces muertos y desarraigados;
Judas usa varias metáforas tomadas de la naturaleza para describir a estos falsos maestros:
Manchas en vuestros ágapes. Mancha nos habla de suciedad que arruina la apariencia de algo, así eran estos impíos que se mezclaban libremente en las reuniones fraternales de comunión cristiana llamadas ágapes, que viene de la palabra griega que habla del amor sacrificial de Dios por Su pueblo y ellos comían impúdicamente, sin respeto, sin remordimiento de conciencia, ya que esas reuniones promovían la unida de la Iglesia, misma que ellos trataban de destruir.
Se apacientan a sí mismos. Pastores que se pastorean a si mismos, en vez de preocuparse por el pueblo, solo buscan su propio beneficio, como ya se había profetizado en Ezequel 43:2 Hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel; profetiza, y di a los pastores: Así ha dicho Jehová el Señor: ¡Ay de los pastores de Israel, que se apacientan a sí mismos! ¿No apacientan los pastores a los rebaños.
Nubes sin agua. Así como un campesino ve venir la nube y espera de ella agua para sus tierras, pero solo la ve pasar de largo y ser llevadas de acá para allá por los vientos sin dejar una sola gota de agua para su provecho, así también son estos falsos maestros que abundan en palabras elocuentes, pero que no tienen nada de sustancia.
Árboles otoñales. Si el fruto lo dan en primavera, estos los compara con árboles de otoño que son sin fruto, además les dice que son dos veces muertos y desarraigados, esos árboles no van a dar nunca fruto, solo sirven para hacer de ellos leña y nada mas.
13 fieras (violentas) ondas del mar, que espuman su propia vergüenza (arrojan como espuma sus maldades); estrellas errantes (fugaces, sin rumbo), para las cuales está reservada eternamente la oscuridad de las tinieblas.
Fieras ondas del mar. Esta imagen del mar violento que toma todo lo que encuentra a su paso y lo entrega en la orilla de la playa, describe a los impíos cuyos malvados corazones impulsan a participar en actividades vergonzosas y lo pone como que espuman su propia vergüenza, de la misma manera que las personas evitan están en contacto con esos desechos que el mar llevo violentamente a la orilla, de la misma manera los creyentes deben de evitar el contacto con las palabras y las obras de estos impíos.
Estrellas errantes. Es aquella estrella que a perdido su curso, que se ha convertido en una estrella fugaz que desaparece en la oscuridad de la noche, esas ya no pueden ser usadas por lo navegantes luces guía para tener una dirección correcta en su travesía.
Para las cuales está reservada eternamente la oscuridad de las tinieblas. Esta gente malvada pasará la eternidad en la oscuridad total.
14 De éstos también profetizó Enoc, séptimo desde Adán, diciendo: He aquí, vino el Señor con sus santas decenas de millares,
15 para hacer juicio (castigar) contra todos, y dejar convictos (condenados) a todos los impíos (perversos) de todas sus obras impías (malas) que han hecho impíamente (insolentemente), y de todas las cosas duras que los pecadores impíos han hablado contra él.
También profetizó Enoc. Judas tomara otra porción de un libro no canónico de Enoc, que no implica que lo considere como parte de la Escritura, pero si un libro de consulta que en esa época era bien conocido y respetado.
Séptimo desde Adán. En la descendencia de Adán que encontramos relatada en el libro de Génesis capítulo 5, Enoc es la genealogía número 7, situada antes del diluvio, Enoc “caminó con Dios” y que fue transpuesto por Dios (llevado al cielo) sin ver muerte.
Diciendo. Judas trae las palabras de Enoc y las pone en relación al regreso de Cristo, cuando vuelva acompañado de millares de sus santos, pero esta vez para hacer juicio y castigar a los impíos, de los cuales ha estado advirtiendo en todos estos versículos.
16 Estos son murmuradores, querellosos (quejumbrosos), que andan según sus propios deseos, cuya boca habla cosas infladas (con orgullo), adulando (halagando) a las personas para sacar provecho.
Murmuradores, querellosos. Estos de todo se quejan y todo critican, y no habla de quejas o criticas legítimas, que llevan a mejorar alguna área para beneficio de la iglesia, sino quejas por cosas que no cumplen sus propios deseos, pero sus quejas las dirigen a otros, no con los que están hablando, a ellos les dicen cosas bonitas, y los halagan, pero solo para sacar provecho de ellas.
Aplicación Práctica: Contender ardientemente por la fe haciendo énfasis en guardar nuestras convicciones ceñidas a la Palabra de Dios.
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