Wednesday, August 30, 2017

Génesis 26 Caminando Conforme a Nuestra Herencia


Objetivo: Ayudar al jóven a aprender a caminar conforme a nuestra herencia, a pesar de nuestra naturaleza.

Versículo a memorizar: “Habita como forastero en esta tierra, y estaré contigo, y te bendeciré; porque a ti y a tu descendencia daré todas estas tierras, y confirmaré el juramento que hice a Abraham tu padre”. Génesis 26:3

Desarrollo:
Vs 1-6 Isaac y nuestra herencia
1 Después hubo hambre en la tierra, además de la primera hambre que hubo en los días de Abraham; y se fue Isaac a Abimelec rey de los filisteos, en Gerar.

Esa otra época de hambre fue mencionada en Génesis 12:10 cuando Abraham se fue a Egipto, esta vez, Isaac planea hacer lo mismo, sale de habitar junto al pozo del Viviente-que-me-ve (Beer Lahairoi) que se encontraba entre Cades y Bered (Gn 16:14) pero pasa antes por la ciudad de Gerar y allí se le aparece Dios para alertarle de no ir a Egipto.

2 Y se le apareció Jehová, y le dijo: No desciendas a Egipto; habita en la tierra que yo te diré.
3 Habita como forastero en esta tierra, y estaré contigo, y te bendeciré; porque a ti y a tu descendencia daré todas estas tierras, y confirmaré el juramento que hice a Abraham tu padre.
4 Multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo, y daré a tu descendencia todas estas tierras; y todas las naciones de la tierra serán benditas en tu simiente.

Dios le da tres instrucciones claras:
1.    No desciendas a Egipto (para que no dependa de Egipto, sino solo de Dios)
2.    Habita en la tierra que yo te diré (más adelante le revelará el lugar)
3.    Habita como forastero en esta tierra (para que mientras este en Gerar, no agarre ninguna de sus costrumbres, que no se amolde a ellos)

Pero al mismo tiempo, Dios le da siete promesas:
1. Estaré contigo.
2. Te bendeciré.
3. A ti y a tu descendencia daré todas estas tierras.
4. Confirmaré el juramento que hice a Abraham tu padre.
5. Multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo.
6. Daré a tu descendencia todas estas tierras.
7. Todas las naciones de la tierra serán benditas en tu simiente.

5 por cuanto oyó Abraham mi voz, y guardó mi precepto, mis mandamientos, mis estatutos y mis leyes.
Dios le dice a Isaac la razón de estas promesas, y son porque Abraham, su padre; oyó a Dios y obedeció, recordemos que Abraham creyó a Dios y le fue contado por Justicia (Gn 16:6).

6 Habitó, pues, Isaac en Gerar.
Isaac pues, obedece a la instrucción de Dios.

Vs. 7-11 Isaac y nuestra naturaleza
7 Y los hombres de aquel lugar le preguntaron acerca de su mujer; y él respondió: Es mi hermana; porque tuvo miedo de decir: Es mi mujer; pensando que tal vez los hombres del lugar lo matarían por causa de Rebeca, pues ella era de hermoso aspecto.
Abraham ya había pasado por esta prueba un par de veces (Gn 12:13 y 20:2) sin pasarla, y ahora Isaac se mete en el mismo problema, y auqnue ciertamente era su sobrina y la palabra hermana podría extenderse a “Sobrina”, de cualqueir forma igual que Abraham no estaba diciendo la verdad completa, por lo que lo hace una mentira.

8 Sucedió que después que él estuvo allí muchos días, Abimelec, rey de los filisteos, mirando por una ventana, vio a Isaac que acariciaba a Rebeca su mujer.
Obviamente eras caricias de esposos de tal forma que Abimelec no tuvo dudas de que era su mujer.

9 Y llamó Abimelec a Isaac, y dijo: He aquí ella es de cierto tu mujer. ¿Cómo, pues, dijiste: Es mi hermana? E Isaac le respondió: Porque dije: Quizá moriré por causa de ella.
Cuando Isaac es confrontado por su acto, dice la vedad y la razón que era el miedo de morir por causa de ella.

10 Y Abimelec dijo: ¿Por qué nos has hecho esto? Por poco hubiera dormido alguno del pueblo con tu mujer, y hubieras traído sobre nosotros el pecado.
Ahora un rey pagano esta mas preocupado que no entrara pecado a su reino que el mismo siervo de Dios.

11 Entonces Abimelec mandó a todo el pueblo, diciendo: El que tocare a este hombre o a su mujer, de cierto morirá.
Dios le concede protección a Isaac para quiterle el miedo por medio de este decreto del rey Abimelec.

Vs. 23-33 Isaac y nuestro porpósito
12 Y sembró Isaac en aquella tierra, y cosechó aquel año ciento por uno; y le bendijo Jehová.
Estando en la tierra de Gerar Isaac sembro y tuvo mucha cosecha en ese año de hambre, la razón es porque que Dios le bendijo como le prometió en Génesis 26:3

13 El varón se enriqueció, y fue prosperado, y se engrandeció hasta hacerse muy poderoso.
14 Y tuvo hato de ovejas, y hato de vacas, y mucha labranza (criados); y los filisteos le tuvieron envidia.
Ya tenía muchas cosas que le había heredado Abraham, ahora además de eso con la bendición de Dios, Isaac fue prosperado y eso lo volvió muy poderoso que genero envidia en de sus vecinos filisteos.

15 Y todos los pozos que habían abierto los criados de Abraham su padre en sus días, los filisteos los habían cegado (cerrado) y llenado de tierra.
A la muerte de Abraham, los filisteos habían cerrado los pozos que había abierto, quizá también por envidia.

16 Entonces dijo Abimelec a Isaac: Apártate de nosotros, porque mucho más poderoso que nosotros te has hecho.
Abimelec es ahora el que tiene temor de Isaac, y prefiere poner distancia entre ellos 2 para evitar que algún día tengan un altercado y salga perdiendo.

17 E Isaac se fue de allí, y acampó en el valle de Gerar, y habitó allí.
Isaac no puso objección, Dios le había dicho que viviera un tiempo allí pero no esa donde Dios lo quería ya que le había dicho “habita en la tierra que yo te diré” (Gn 26:2) y salió en dirección de Beer  de donde había salido, pero se quedo todavía en los límites del territorio de Gerar, en el valle y allí habitó.

18 Y volvió a abrir Isaac los pozos de agua que habían abierto en los días de Abraham su padre, y que los filisteos habían cegado (cerrado) después de la muerte de Abraham; y los llamó por los nombres que su padre los había llamado.
Comenzó a abrir pozos de agua que son muy apreciados en esa zona semi-desértica y honró a su padre dejándoles los mismos nombres de los pozos que Abraham les había dado.

19 Pero cuando los siervos de Isaac cavaron en el valle, y hallaron allí un pozo de aguas vivas,
Este tipo de “pozo de aguas vivas” se refiere a manantiales de agua, o rios subterraneos que a diferencia de los otros pozos, estos se podrían utilizar como agua potable.

20 los pastores de Gerar riñeron con los pastores de Isaac, diciendo: El agua es nuestra. Por eso llamó el nombre del pozo Esek [esto es, Contención], porque habían altercado con él.
Como ese pozo aún estaba en la tierra de los filisteos, ellos se sientieron con el derecho de reclamarlo, pero la verdad es que tenían envidía como dijo Génesis 26:14

21 Y abrieron otro pozo, y también riñeron sobre él; y llamó su nombre Sitna [esto es, Enemistad].
Al parecer por la misma razón de la anterior, aún se encontraba en territorio de Gerar.

22 Y se apartó de allí, y abrió otro pozo, y no riñeron sobre él; y llamó su nombre Rehobot [esto es, Lugares Amplios o Espaciosos], y dijo: Porque ahora Jehová nos ha prosperado, y fructificaremos en la tierra.
23 Y de allí subió a Beerseba [esto es, Pozo de 7 o Pozo del juramento].
Isaac esta evitando el conflicto, se aparta del lugar donde y abre un tercer pozo que al parecer queda fuera del territorio de gerar, razón por la cual ya no hay pelea, pero no se quedo allí, y llega a Berseba de donde había habitado Abraham (Gn 21:31).

24 Y se le apareció Jehová aquella noche, y le dijo: Yo soy el Dios de Abraham tu padre; no temas, porque yo estoy contigo, y te bendeciré, y multiplicaré tu descendencia por amor de Abraham mi siervo.

Se le volvió a aparecer Dios para hablar con el, quien se presenta como el Dios de su padre, le anima y le recuerda que parte de sus promesas hechas con anterioridad y de vuelve a dar la razón, que cumplirá esas promesas por amor de Abraham a quien Dios mismo le da el titulo de “mi siervo”

25 Y edificó allí un altar, e invocó el nombre de Jehová, y plantó allí su tienda; y abrieron allí los siervos de Isaac un pozo.
Isaac entiende que esta es la tierra donde Dios le había dicho “habita en la tierra que yo te diré”, por lo que allí invoca el nombre del Señor, planta su tienda y manda a Abrir un pozo.

26 Y Abimelec vino a él desde Gerar, y Ahuzat, amigo suyo, y Ficol, capitán de su ejército.
27 Y les dijo Isaac: ¿Por qué venís a mí, pues que me habéis aborrecido, y me echasteis de entre vosotros?
28 Y ellos respondieron: Hemos visto que Jehová está contigo; y dijimos: Haya ahora juramento entre nosotros, entre tú y nosotros, y haremos pacto contigo,
Los mismos que lo habían corrido, vinieron ahora a Isaac para tratar de hacer un pacto de paz con el, no solo por que era muy poderoso, sino porque ellos mismos habían visto que Dios estaba con Isaac.

29 que no nos hagas mal, como nosotros no te hemos tocado, y como solamente te hemos hecho bien, y te enviamos en paz; tú eres ahora bendito de Jehová.
Esto no parece ser completamente cierto, ya que aunque si le dejaron habitar en su tierra por un tiempo y el rey había emitido un decreto para protejerlo, también es el mismo que le había pedido que se separaran.

30 Entonces él les hizo banquete, y comieron y bebieron.
Isaac no toma venganza, ni guarda rencor, por el contrario les hace una fiesta ya que al dia siguiente harán el pacto de paz.

31 Y se levantaron de madrugada, y juraron el uno al otro; e Isaac los despidió, y ellos se despidieron de él en paz.
Hacen este pacto o juramento de paz e Isaac los despidio, es decir; les equipo con agua y viveres para el camino.

32 En aquel día sucedió que vinieron los criados de Isaac, y le dieron nuevas acerca del pozo que habían abierto, y le dijeron: Hemos hallado agua.
33 Y lo llamó Seba; por esta causa el nombre de aquella ciudad es Beerseba hasta este día.
Ese mismo día que los despidió, fue que los siervos encontraron agua en el pozo que había hecho allí.

Aplicación Práctica:
Caminar siempre al lado del Señor, buscando agradarle en todo, andado en el Espíritu, aunque a veces caigamos o trapecemos debido a nuestra naturaleza pecadora, pero que eso no nos lleve a alejarnos de Dios, más bien; a venir rapidamente con Dios, confesar nuestro pecado y ser restaurado para poder ser udado y bendecido por Él.

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